martes, 27 de febrero de 2007

Liuvia.

La lluvia cae perpendicularmente al piso así: \ \ \ \ \ y golpea el vidrio del colectivo. Con la cabeza apoyada la ventana veo lo \ \ \ \ \ que sucede. Las gotas viajan y chocan contra el cristal, algunas se desarman otras quedan en el vidrio, con forma de pequeños montículos transparentes, y no caen porque el total de su peso no es suficiente como para arrastrarlas hacia abajo. Pasa el tiempo y la lluvia sigue cayendo y más gotas golpean el vidrio y ahí comienza: las que quedan en la parte superior de la ventana y tienen el peso como para comenzar, lentamente, a rodar hacia abajo comienzan un éxodo. El éxodo hacia su destrucción. En el camino se van uniendo con las gotas que estaban inmóviles en el vidrio y a gestar una nueva gota más grande y pesada que va a descender con mayor rapidez. El hecho de que caigan no significa que se unan a todas las gotas que encuentran en su camino, curiosamente solo se unen con algunas. También es curioso el camino que toman, no caen %100 en línea recta, caen por caminos aleatorios, perfectamente aleatorios, sin pasar dos veces por el mismo lugar. Ninguna se apresura, todas parecen flotar en esa calma que todavía existe en la naturaleza. La estoy mirando, la veo ahora y cae. Se destruye, todo se acabó. Orgasmo.

Colifor.

El sábado no fue lo esperado, no pude hacer muchas de las cosas que tenía ganas y la lluvia llegó recién el domingo a la noche.

Hoy viajé todo el camino al trabajo en uno de esos asientos que están al revés, es decir, no están en la posición en la que suelen estar si no que uno va mirando el camino recorrido. Cuando era un pibe contento de 8 años, solía ir a la casa de campo de un amigo (el que tenía el cuadro con la cara del payaso), la cuestión es que cuando subía al auto que tenía en ese momento, los asientos despedían un olor horrible que me mareaba instantáneamente entonces en el camino tenían que parar porque me mareaba, bajaba del auto y lanzaba un chorro de vómito potente que se estrellaba contra el piso. En eso se resume mi niñez. Recuerdo también que un par de veces viajé en alguna pick up, en la parte de atrás y me mataba, terminaba otra vez mareado. Hoy, una docena y un poco más de años más tarde, puedo viajar en el asiento que va al revés sin titubear, soy inmune.

No quiero escribir lo que voy a hacer todos los días, no quiero que esto termine siendo como el diario de Paris Hilton, salvando los millones de diferencia y mi indudable belleza aplanadora.

Parece que va a ser un largo día, ¿qué digo? una semana muy larga.

jueves, 22 de febrero de 2007

Jueves, de medias de vestir

Esta mañana, al salir de mi casa y cruzar la calle rumbo a la parada de colectivo ví en el piso, cerca de ese mini canal por donde corre el agua en los días de lluvia, una fotografía rota. Se notaba que la habían cortado con la mano ya que el corte era impreciso, se podía ver la mitad de la cara de un tipo que parecía acariciar los 38 y que tenía un bronceado repugnante (como todos los bronceados). Cada vez que veo fotografías rotas en la calle me llama mucho la atención, me pregunto ¿qué habrá llevado a alguien a hacer eso? bronca seguramente o tal vez, en algunos casos (los menos), la fotografía era de otra época y alguna ama de casa en plena limpieza las tiró a la basura (rotas para que nadie se entere de su intimidad (terror de cualquier ama de casa)). La promesa que trae la fotografía de eternizar un momento, de detener el tiempo, a veces, es un arma de doble filo, sobre todo cuando se trata de viejos amores. Aunque para el que lo experimentó, no hay nada más placentero que hacer mierda la foto con esa cara que te mira el que te metió los cuernos o la que te mandó a cagar, es simplemente reconfortable y liberador. Tenía ganas de escribir acerca de esa cara que se veía en la foto, un cuento, puede ser, hoy no.

Parece ser que al amigo Juan Cruz lo han cambiado de lugar, antes estaba cerca de la oficina de sistemas, ahora, no lo veo más en el lugar de antes, no me tengo que topar con su encantadora mirada persuasiva, ni con su peinado que las mujeres tanto miran. Si está en otra oficina o agonizando en la cama de un hospital, me da igual.

Estoy contento, hoy cuando salga de acá voy a ir a buscar el tan enigmático revelado de fotos, estoy un poco ansioso, ¿Qué fotos habrán salido, cómo habrán salido, cuantas?, hace como tres años que no siento esto ya que desde que salieron las cámaras digitales nunca más llevé a revelar un rollo de papel, cuando sacaba con la camara reflex hacía scanear los negativos y así obtenía fotos digitales (y más barato que revelar un rollo). Antes de eso, cuando sacaba blanco y negro, las revelaba en el laboratorio de la escuela donde hacía el curso de fotografía, después terminé el curso y me quedé sin laboratorio.

Ya casi se termina la semana y tengo planes para el fin de semana, espero que todo salga bien y si no que llueva todo el finde y me pueda enterrar en el sofá a leer mucho.
Hoy el colectivo frenó dos veces y todo el mundo se fue a la mierda, a veces, la energía cinética puede ser muy graciosa ¿Por qué no nos enseñan eso en el colegio?

Juan Cul

En el banco hay un chico que se llama Juan Cruz, tiene el pelo por los hombros y la sonrisa de un millón de dólares. Se viste bien, tiene facciones que seguramente son atractivas para las mujeres y su caminar hace pensar que su vida es cómoda, confortable y suavecita. Como las computadoras de los usuarios del banco no tienen floppy (disquetera) a veces me llama por teléfono para que le copie algunos archivos que me manda por mail a un diskette y cuando me lo cruzo por los pasillos me guiña un ojo y me hace "cht" seguido del gesto de un dedo pulgar hacia arriba. Cuando veo a estos pibes pienso en que seguramente deben haber salido con la compañera de curso más linda, deben haber tenido su auto a los 18 años y todo el mundo le debe tomar cariño en cuestión de segundos. Es un pibe simpático, ganador, un deportivo humano descapotable. El típico pibe que querrías que se ponga de novio con tu hija, o no. Seguramente debe haber terminado su carrera, obviamente en alguna facultad privada y ahí también debe haber intimado con la compañera más atractiva del curso. Juan Cruz compra a quien quiere y como quiere. A veces, cuando me pide que le grabe los archivos, yo no puedo hacerlo porque tengo que hacer otras cosas, pero me lo pide de una manera que no sé por qué pero termino diciéndole que sí. Yo no creo que Juan Cruz haya llorado al superar sus 16 años, no creo que haya tenido mayores disgustos que los que le hubiera podido ocasionar algún cumpleaños de la abuela al que no tenía ganas de ir. Juan Cruz, sos un pelotudo y odio tu vida perfecta.

Hoy leí una noticia en el diario que decía que en Colombia dos payasos estaban dando una función cuando apareció un hombre y los baleó a quemarropa. Hay que ser muy malo para boletear a un payaso así como así. Cuando tenía ocho años, le tenía terror a los payasos, culpa de IT el payaso y de un cuadro que tenía un amigo en su casa de campo, era terrible, y encima lo tenía en frente de la cama donde dormía yo.

El clima sigue bien, esta noche hay pronóstico reservado. Espero poder vivir un poco cuando salga de la odontóloga.

martes, 20 de febrero de 2007

Manters

La autodestrucción tiene que detenerse porque ya es notable. Tengo que dejar de flagelarme con la comida, me tengo que dar un relax. Hoy en el laburo me voy a podir una ensalada, experiencia paranormal si las hay.

Mañana tengo odontóloga y pienso hacerle una reinstalación de sistema operativo a mis dos muelas que tuvieron bajas en 23 años de guerra.

Extraño a mi psicóloga la Dra Ana Caballieri Ruso, ¿qué estará haciendo ahora? ¿tomando café y mirando por la ventana de algún consultorio, escuchando algún paciente y pensando en lo buenas que eran las sesiones conmigo, mirando el dibujo enfermo que le regalé, pensando en el número que puede llegar a salir en la quiniela?

Últimamente estoy sintiendo un nuevo despertar de interés por el cine, asique estuve bajándome películas, tengo en la lista de espera como 6 películas pero no consigo poder encontrar ese momento para verlas tranquilo, con uno de los gatos durmiéndo arriba de mi panza.

Ayer tenía que ir a dejar el rollo de fotos pero en vez de tomarme el subte me fui caminando por avenida de Mayo. A pesar de que caminé muchas veces por esa avenida no puedo dejar de sorprender al caminar una vez más a través de esas calles. Es demasiado linda, y siempre descubrís algo que no habías visto
la última vez que estuviste ahí.

El otro día en el camino a casa se me ocurrió una idea que preferiría haberla soñado: un vallet de matafuegos con tutú bailaban alguna sinfonía de algún viejo con el pelo blanco con apellido alemán. No es joda esto.

Hoy clima seguía bien, a mi gusto, ni tan tan ni muy muy diría alguna vieja. La tarta de calabaza que se hace en la casa de Virrey Arredondo 2375 PB "D" no se hace en ningún lado. Esta mañana desayuné gelatina y me fui por la puerta, feliz.

lunes, 19 de febrero de 2007

Lunel

Que bien que la pasé anoche. Comimos unas carnes asadas con mi amigo del sur que bajó de las montañas para hacer la revolución. Nos tomamos un vino que me hizo sentir que lo iba a extrañar justo en las dos últimas copas. Apagamos las luces, vimos las estrellas (las que se pueden ver desde casa nomás) y tuvimos la hermosa visita de una señora araña que se paseaba por la pared al ritmo de las guitarras que tiritaban de ska a metros nuestros. La noche fue dulce, costó levantarse, pero gracias a la explotación de los colombianos me tomé un alquitranado a las 9.A.M. que me dejó fresco como un comerciante.

El sábado estuve muy contento, hizo frío y hasta pude usar mi querida campera verde. Mi amigo de las montañas que bajó para hacer la revolución me llevó el viernes a una pizzería a la que volví el sábado, esta vez en compañía de mi novia. La pizzería no se puede creer, es algo increíble, siempre está lleno de tacheros muy panzones, partido de futbol de fondo y no hay lugares para sentarse, si querés comer comés parado (hay como unas barritas para apoyar el pedazo e pizza). Se puede ver vajilla de años en los que no escatimaban en nada, ni en el tamaño de los vasos ni en el grosor de sus paredes, mucho ambiente de barrio, se escuchan muchas historias de jugadores de fubtol de dudosa existencia y hazañas que rosan lo sobrenatural. Detras del mostrador se ve la foto de 3 pibes de jóvenes y abajo la leyenda juntos desde 1958 y mientras leo le doy gracias a esos tres amigos que hicieron posible semejante deleitte secador de vientre. La recomendación del amigo de la montaña fue la fugazzeta rellena y creanme amigos, no me arrepentí. 2,70 un viaje a otro mundo donde las textures se mezclan evolucionan se vuelven a pelear y después son amigas invisibles. Un orgasmo de muzzarella que desborda por los costados, ¡atención! atacarla rápido que es más rica mientras el queso está blandito.

Data: Pizzería La Mezzeta Av. Elcano y Forest.

Hoy el clima es ideal, corre viento, está fresco. Tengo pensado salir del trabajo y llevar a revelar el rollo de 36, que esconde imágenes desconocidas. Cuando las tenga tal vez se las envíe por mail.

Siento que está todo bien y mucho amor por la persona que me espera en casa.

viernes, 16 de febrero de 2007

El último día

Se los voy a decir una sola vez: lo que hacen las petroleras me parece un horror. No se qué se puede esperar de gente que taladra la tierra y las profundidades del mar buscando esa cosa sucia llamada petróleo, que no hace más que alimentar los motores contaminantes de los pelotudos que no me dejan cruzar la calle cuando camino por la senda peatonal. Esta todo mal con ustedes, señores petroletros con diente enchapados en oro, succionando con sus motores la sucia sustancia negra, ojalá que se les acabe pronto a ver qué hacemos.

Ayer no comimos pizzas al final, porque hubo un mal entendido. Cuando llamé a la pizzería para hacer el pedido me atendio una persona muy particular, Al parecer, le encomendé la imposible tarea de que anotara en una libreta: Una pizza de muzzarela otra Napolitana con jamón y media docena de empanadas, dos de jamón y queso, dos de pollo y dos capresse. No pudo con esa tarea, era demasiado para este ser viviente.Cuando le preguntaba el precio final me leía el precio de cada cosa y cuando le preguntaba qué le había pedido me reeleía todo el pedido pero siempre le faltaba algo y otra vez. Estuve 10 minutos hablando por teléfono, cuando le dije que iba a pagar con 100 pesos me dijo ah no, no tenemos cambio, ¿por que no va a buscar cambio por ahí usted?(Sic) yo le dije: "escuchame, yo te estoy comprando un producto el vuelto, me parece, que deberías tener la delicadeza de conseguirlo vos" y después me enojé (porque hasta el momento la situación me parecía graciosa entonces le hablaba con toda la tranquilidad del mundo) le dije que no trajera nada, a lo que me dijo bueno dejá lo conseguimos nosotros al cambio. Después de dos horas de esperar, llamé a la pizzeria, no atendía nadie, los hijos de puta habían cerrado y no me trajeron nada. Deben haberse cagado de risa de mí entre las muzzarellas y cajas de cartón. Hijos de puta. Lo peor de todo es que era re tarde y llamé como a 5 lugares diferentes y todos me decían "estamos cerrando", terminé comiendo tacos.

Esta mañana llegué y el potus tiene unas raíces muy pequeñas que flotan en el agua, parecen hilitos. Se lo vé saludable.

Hoy viajaba en colectivo y al lado mío charlaban dos señores gordos que usaban cinturón y uno le decía al otro que hacía unos días, había estacionado en un lugar y cuando hizo marcha atrás para salir, una botella rota de cerveza le cortó la cubierta. Me puso contento, desde que vivo en Buenos Aires me he convertido en un peatón fursioso, una especie de Willian Wallace de los peatones, cuando el tipito del semáforo se pone verde yo cruzo y no freno por nada del mundo. Hoy en día mi peor enemigo son los automóviles y cuando escucho a alguien que se le rompió el auto me pongo contento. Cuando es un conocido le digo que bajón, pero por dentro una sonrisa macabra que muestra los dientes se me dibuja.

El día amaneció todo gris y lloviznando (así son mis días preferidos) me puse el piloto cremita que compré hace un par de años en un sucucho perdido cerca del centro y salí con el y una sonrisa de luto en la cara. Me encanta la llovizna y la lluvia todavía más. Eso sí, odio los paraguas.

Mañana va a ser sábado, espero hacer algo interesante.

Como me quedé con ganas de comer pizza hoy en el trabajo voy a comer pizza, mierda.

jueves, 15 de febrero de 2007

Viernes digo Jueves

Todas las mañanas cuando voy al trabajo, en la parada del colectivo hay una pareja de chicos jóvenes de unos 20/24 años y yo siempre los observo. Me atrevo a decir que son novios (y usan esa palabra) y viven juntos. Todas las mañanas están a la misma hora y al parecer ella se va al trabajo y el novio se queda en la casa, cuando están en la parada un simpático perrito color dorado los acompaña, lo llevan atado. Los últimos días que los vi, el perrito se perseguía la cola tratando de alcanzarla y parecía un trompo fuera de control. Tienen costumbres espantosas, la facciones lindas pero siempre esta fumando junto a su novio y a veces tomando coca cola, la gente que fuma a la mañana me pone de mal humor pero, vamos, ¿quién es tan enfermo como para tomar una coca cola en ayuno? Desde los primeros días que tuve que ir a esa parada de colectivo para ir a mi nuevo trabajo los vi y me llamaron la atención porque aparte se quieren mucho y es muy meloso ver tanto amor a esa hora, yo generalmente no dejo que se me hacerque nadie por lo menos hasta que hayan pasado tres horas después de haberme levantado. No es divertido andar dándose besos en la boca con los fluídos que tiene la boca a esa hora, es un asco. Bueno, estoy escribiendo esto porque esta mañana cuando llegué estaba la chica sola, paseando el cigarrillo por su boca y yo atrás de ella a las pueteadas porque el humo me daba de lleno en la cara. En el viaje me pregunté ¿qué habrá pasado con el muchacho? aca van las hipótesis de lo que puede haber pasado:

-Camino a la parada el camión de la basura aplastó a "Piluki" el perrito dorado que era el alma de la casa.

-Tuvieron una discusión a la noche porque el muchacho no podía conseguir una erección con "Piluki" en la misma habitación, "me mira a los ojos" decía él y la chica le dijo que "Piluki" era todo lo que tenían y merecía estar en donde tuviese ganas.

-Al chico le salió la beca que tanto había esperado para hacer el master de podología en Sir lanka y volverá en tres largos meses.

-La chica descubrió al muchacho con "Piluki" entre los brazos en una posición que daba que pensar junto a un tarro de mermelada abierta, no había panes a la vista, un disco de los pimpinelas inundaba de sonido el departamento.

Esta noche vamos a comer pizza con otros seres humanos que vienen a casa.

El día está nublado y hay mucha humedad, la chica que trabaja en la lavandería a la vuelta de mi casa, en este momento, debe estar lavando mis remeras, sin ganas.

miércoles, 14 de febrero de 2007

Miércoles-Jueves para mí.

¿Por qué complican las cosas? estando en la era de los grandes avances tecnológicos a la gente de google se le ocurre cambiar el formato de los blogs con una nueva supuesta versión beta que, según ellos, se las trae. Todo bien pero, porque mierda no puedo utilizar mis templates en los nuevos bloggers betta. En fin.

Anoche comimos rapiditas, con jamón queso y verduras frescas. Me hubiera gustado manejar un poco mejor los tiempos. Tengo un rollo de fotos en la mochila, en el bolsillo chiquito, es increíble. En estas épocas de fotografía digital -en el momento- me había olvidado de la sensación de tener un rollo de fotos que encierra tantas incógnitas en un bolsillo. No recuerdo las fotos que pueden aparecer en el revelado ya que al no ser digital, saco 3 fotos un día, al mes otras 2, 3 meses después 1 y así, entonces cuando uno ve el revelado es mágico, aparecen imágenes que ya habíamos olvidado. El potus sigue sin cambios, lindo y verde pero todavía no creció. Mi ansiedad característica choca contra la calma de la naturaleza que se toma su tiempo para crecere de apoco, pero la mayoría de las veces muy fuerte.

Ayer charlaba con mi amigo "la mano estigmada de alto alberdi" Javier Martinez y me tiró la idea de hacer un blog con estos mails matutinos, yo le dije que no, que me parecía que el formato ideal era este, que la gente no iba entrar a leer estas boludeces a un blog y a mi no me gusta venderme. Anoche me desperté en la mitad de la noche y un mono de pelo sedal me transmitió telepáticamente la orden de hacerlo.